3. Revisa tu red
En ocasiones, la razón por la que tu internet se pone lento es porque la cantidad de MBPS por la que estás pagando es muy poca para todas las personas y los dispositivos que tienen acceso a tu red. Si por ejemplo, tu conexión es sólo de 2 MBPS y tienes 8 dispositivos conectados, lo más probable es que tu conexión siempre esté lenta. Es preferible invertir un poco más y lograr una señal más fluida.
4. No escondas tu módem
Si tu módem está muy guardado o tiene muchas cosas alrededor, estarás bloqueando la señal que emite y por lo tanto no dejas que cumpla su principal función. Lo mejor que puedes hacer es buscar un espacio (preferiblemente en el centro de la casa) en donde no hayan muchos objetos cerca y no haya nada bloqueando su señal.